Por Xema AB
Doctora en
Psicología y terapeuta Gestalt, Mireia Darder (Barcelona,1959)
publica Nacidas para el Placer "con
la idea de que la mujer mejore su nivel de satisfacción con la vida y con su
sexualidad" ya que, según esta especialista, "la mayoría de las
mujeres actuales han alcanzado el feminismo desde la cabeza" pero
necesitan recuperar el poder desde el instinto.
Así comienza el artículo que nos muestra un poco la
forma de pensar de la autora anteriormente mencionada. Lo traigo hoy aquí
porque creo que puede ser un libro a tener en cuenta a la hora de analizar la
forma de vivir la sexualidad la mujer.
No obstante hay un punto en el que estoy en
desacuerdo: nos dice que “El rol de la
mujer que da la cultura patriarcal no contempla que la mujer sea agresiva,
potente y combativa”… Esta frase rechina en mi interior pues creo que uno
de los ‘valores’ transmitidos por la sociedad patriarcal es la violencia
ejercida para dominar sobre todo y sobre todos, la cual tiene su forma de
acción con la agresividad y el combate. Pienso que las mujeres guerreras y
violentas no manifiestan su auténtica esencia, sino lo que han aprendido para
defenderse y sobrevivir en esta sociedad, y ello abarca todos los aspectos,
incluida la sexualidad, evidentemente.
De la frase anterior rescataría el término ‘potente’,
pero alejándolo de su significado de ejercer la fuerza, pero sí acercándolo al
de potencialidad o posibilidad de realizar cosas.
Lo que nos puede decir Mireia Darder no deja de ser
otro punto de visa a tener en cuenta y un refuerzo de lo que nos vienen
mostrando desde Inspiración Femenina y que con seguridad se profundice
muchísimo más en el próximo congreso internacional “Universo Sexual Humano”.
Xema AB
SEXUALIDAD
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07/03/2014
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Mireia Darder:'A
la mujer se le niega la posibilidad de seguir sus apetencias'
Doctora en Psicología
y terapeuta Gestalt, Mireia Darder (Barcelona,1959)
publica Nacidas para el Placer "con la idea
de que la mujer mejore su nivel de satisfacción con la vida y con su
sexualidad" ya que, según esta especialista, "la mayoría de las
mujeres actuales han alcanzado el feminismo desde la cabeza" pero
necesitan recuperar el poder desde el instinto.
Para ello, es
necesario un viaje en el que se alejen del rol establecido para las mujeres en
la cultura patriarcal, unas características que impiden a la mujer "la
posibilidad de ser curiosa, de investigar, de explorar, de moverse según sus
apetencias interiores sin más cuestionamientos".
Mujeres&Cía: ¿Cuáles
considera que son los principales problemas de la mujer actual?
Mireia Darder: Que
habiendo avanzado en muchos aspectos hay algunos en los que no ha cambiado y
continua con la mentalidad de hace muchos años. Uno de los problemas actuales
es la búsqueda de perfección que nos lleva a querer hacer muchas cosas bien,
ser buena madre, buena esposa, buena, profesional.... esto nos lleva aun estrés
enorme y no nos deja espacio para el disfrute, el juego y el placer.
El
rol de la mujer que da la cultura patriarcal no contempla que la mujer sea
agresiva, potente y combativa
M&C: Hablas de las
contradicciones en las que están inmersas las mujeres ¿cuáles son estas
contradicciones y, entre ellas, cuál es la más peligrosa?
MD: Una
de las contradicciones es que las mujeres tenemos una manera de hacer las cosas
más basada en la colaboración que en la competitividad. Nos contradecimos al
imitar los modelos del hombre abdicando de los nuestros propios.
Otra es la oposición
entre el afán de perfección del que hablaba antes y los ritmos naturales de
nuestro cuerpo, los cuales tenemos que controlar e inhibir para seguir los
modelos que se nos exigen desde una cultura patriarcal.
M&C: El
feminismo sigue siendo temido en la sociedad y, de hecho, son muchas las
mujeres que no quieren declararse feministas ¿a qué considera usted que se debe
esta situación?
MD: A
que el rol de la mujer que da la cultura patriarcal no contempla que la mujer
sea agresiva, potente y combativa; más bien la define como alguien a proteger y
tutelar. A la mujer se le niega la posibilidad de ser curiosa, de investigar,
de explorar, de moverse según sus apetencias interiores sin más
cuestionamientos. Muchas de nosotras nos lo hemos creído.
El
patriarcado nos han obligado a reprimir nuestra potencialidad más grande,
nuestra gran capacidad para el placer
M&C: ¿Cómo cree que es, en general,
la relación de las mujeres con su propio cuerpo? ¿Es más natural en el caso de
los hombres?
MD: El
patriarcado ha asociado lo natural a las mujeres, por ello nos ha impuesto el
control y el manejo sobre nosotras y nuestros cuerpos de la misma manera que
maneja y controla la naturaleza. Por tanto nos han obligado a reprimir nuestra
potencialidad más grande, nuestra gran capacidad para el placer. En el caso de
los hombres también ha habido un control sobre el cuerpo, con la
diferencia de que a ellos se les permite más libertad e iniciativa.
M&C: ¿Qué
retos debe de afrontar la sociedad y, especialmente, las mujeres respecto a la
sexualidad?
MD: El
reto más importante es abrirse al mundo de las sensaciones internas, el dejarse
sentir qué es lo que deseo y necesito, conectarse con el propio cuerpo,
diferenciándolo de lo que se espera que sienta según el modelo establecido.
Además hay que atreverse a curiosear, explorar y experimentar con la sexualidad
para poder llegar al placer y el goce.
M&C: En
su extensa carrera como formadora y terapeuta ¿qué es lo que más le ha llamado
la atención en cómo afronta el ser humano la sexualidad?
MD: El
encasillamiento y reduccionismo. Es decir, como se tiende a otorgar a la
sexualidad un rol menor y predeterminado en nuestras vidas, abdicando de su
enorme potencialidad, plasticidad y sus distintas formas de ser vivida. Y como
eso nos convierte en neuróticos
M&C: Como
mujer y profesional, ¿cómo considera la situación actual de la mujer, tanto en
el ámbito estrictamente profesional, como en la sociedad en general?
Creo que hemos
avanzado en algunos aspectos como por ejemplo en la igualdad legal de derechos.
Pero mientras esto no se traduzca en cosas reales como que las mujeres tengan
acceso a ser dueñas de los recursos, y sigan haciendo la mayor parte del
trabajo y recibiendo la menor parte de las recompensas, la situación de la
mujer no habrá cambiado y no gozara de verdadera libertad y igualdad.